Paulina Rubio y Nicolás Vallejo-Nágera se vieron las caras en un juzgado de la ciudad de Miami, en una audiencia de conciliación para intentar llegar a un acuerdo en el proceso de divorcio de la pareja.
Desde el comienzo del juicio el ambiente ya estaba tenso, a Paulina se la pudo ver enojada, interrumpió al juez, George Sarduy, y empezó a hablar en defensa propia. A partir de aquí los ataques hacia Colate no cesaron, dijo que era un mal padre, que no le cambiaba los pañales y que el juez tenía que considerar quitarle el 50% de la custodia.
La cantante también dijo que era imposible mantener una conversación con su expareja ya que este la agrede e insulta, que el empresario no quería firmar el divorcio porque ella era la inversión monetaria más importante que él había hecho.
Colate no tardó en defenderse, alegando que Paulina le pone trabas para ver a su hijo. “He estado cuidando a mi hijo desde marzo del año pasado. Y lo he cuidado en un 80 por ciento yo solo, sin ninguna niñera —aunque se supone que la tuviera, pero no la tengo”.
El empresario español continuó con sus argumentos. “Todo lo que pasa aquí me parece absurdo porque tengo otra educación. Vengo de otro país y vivo en este país sólo por mi hijo, y porque quiero que tenga lo mejor de ella y lo mejor de mí. Vengo de una familia muy pudiente y adinerada, y no tengo por qué estar aquí peleándome frente a jueces y abogados”.
Mientras tanto, Rubio continuó con sus ataques: “Señor juez, esto está muy claro: cuando usted anuncia un divorcio a través de la revista Hola, en vez de hacerlo de manera privada... Todo es una mentira y estoy lista para mostrar en corte lo que es bueno para mi hijo. Eso es todo… sin difamación, sin prensa que pague por exclusivas. Eso no es justo para mi hijo. Cuando él tenga 8 años va a preguntarse ‘¿por qué mi papa fue a una revista a decir lo que estaba pasando entre ustedes?’. No es justo”.
Tras tantos ofensivas hacia su persona, Colate respondió tranquilo, diciendo que ella se había llevado al niño a Marruecos sin su consentimiento ni el del juez, sin las vacunas apropiadas y que las fotos de su viaje fueron publicadas. Que él no tiene que vivir en Miami ya que toda su familia esta en España, pero que lo qué más quiere en este mundo, su hijo, está ahí y es donde quiere estar, finalizó.
Después de constatar que la ex pareja estaba lejos de llegar a un acuerdo, el juez ordenó una mediación familiar y regresar a la corte en junio
Desde el comienzo del juicio el ambiente ya estaba tenso, a Paulina se la pudo ver enojada, interrumpió al juez, George Sarduy, y empezó a hablar en defensa propia. A partir de aquí los ataques hacia Colate no cesaron, dijo que era un mal padre, que no le cambiaba los pañales y que el juez tenía que considerar quitarle el 50% de la custodia.
La cantante también dijo que era imposible mantener una conversación con su expareja ya que este la agrede e insulta, que el empresario no quería firmar el divorcio porque ella era la inversión monetaria más importante que él había hecho.
Colate no tardó en defenderse, alegando que Paulina le pone trabas para ver a su hijo. “He estado cuidando a mi hijo desde marzo del año pasado. Y lo he cuidado en un 80 por ciento yo solo, sin ninguna niñera —aunque se supone que la tuviera, pero no la tengo”.
El empresario español continuó con sus argumentos. “Todo lo que pasa aquí me parece absurdo porque tengo otra educación. Vengo de otro país y vivo en este país sólo por mi hijo, y porque quiero que tenga lo mejor de ella y lo mejor de mí. Vengo de una familia muy pudiente y adinerada, y no tengo por qué estar aquí peleándome frente a jueces y abogados”.
Mientras tanto, Rubio continuó con sus ataques: “Señor juez, esto está muy claro: cuando usted anuncia un divorcio a través de la revista Hola, en vez de hacerlo de manera privada... Todo es una mentira y estoy lista para mostrar en corte lo que es bueno para mi hijo. Eso es todo… sin difamación, sin prensa que pague por exclusivas. Eso no es justo para mi hijo. Cuando él tenga 8 años va a preguntarse ‘¿por qué mi papa fue a una revista a decir lo que estaba pasando entre ustedes?’. No es justo”.
Tras tantos ofensivas hacia su persona, Colate respondió tranquilo, diciendo que ella se había llevado al niño a Marruecos sin su consentimiento ni el del juez, sin las vacunas apropiadas y que las fotos de su viaje fueron publicadas. Que él no tiene que vivir en Miami ya que toda su familia esta en España, pero que lo qué más quiere en este mundo, su hijo, está ahí y es donde quiere estar, finalizó.
Después de constatar que la ex pareja estaba lejos de llegar a un acuerdo, el juez ordenó una mediación familiar y regresar a la corte en junio
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